domingo, 20 de febrero de 2011

Benedicto XVI llama a proponer la relación personal con Cristo como llave para alcanzar la plenitud

�Hay que mantener a Dios en el centro de la vida de los fieles�

Benedicto XVI llama a proponer la relaci�n personal con Cristo como llave para alcanzar la plenitud

Al recibir a un grupo de obispos de Filipinas, en visita �ad limina�, el Papa Benedicto XVI se�al� que sin Dios el hombre no es capaz de ver �la alegr�a eterna para la que ha sido creado� por lo que es urgente restablecer su primac�a en la vida de cada persona. El Santo Padre pidi� que los profundos lazos de los cat�licos con el Sucesor de Pedro, que han sido siempre �una caracter�stica importante de la fe en ese pa�s�, aumenten ante �los desaf�os actuales del apostolado�.

19/02/11 9:41 AM | Imprimir | Enviar

(Aci/InfoCat�lica)Si Filipinas debe hacer frente a numerosos retos en �mbito del desarrollo econ�mico, hay que reconocer, dijo Benedicto XVI, que “estos obst�culos a una vida de felicidad y satisfacci�n no son los �nicos que debe abordar la Iglesia” ya que “la cultura filipina se enfrenta tambi�n a cuestiones m�s sutiles que ata�en al secularismo, el materialismo y el consumismo de nuestra �poca”.

“Cuando la autosuficiencia y la libertad se separan de su dependencia y su plenitud en Dios, la persona se crea un destino falso y pierde de vista la alegr�a eterna para la que ha sido creada. El camino para redescubrir el verdadero destino de la humanidad consiste en el restablecimiento de la prioridad de Dios en el coraz�n y la mente de cada persona”.

Por encima de todo, continu� el Santo Padre, “hay que mantener a Dios en el centro de la vida de los fieles y la predicaci�n debe insistir en su existencia, su amor por nosotros, y en que Cristo responde a las preguntas m�s profundas de nuestra vida”.

“Vuestra gran tarea evangelizadora es, por tanto, la de proponer una relaci�n personal con Cristo como llave para alcanzar la plenitud. (...) Al mismo tiempo, hay que reconocer que las nuevas iniciativas de evangelizaci�n s�lo ser�n fruct�feras si (...) los que las proponen creen y viven realmente el mensaje del Evangelio”.

El Papa alab� el influjo positivo de las comunidades eclesiales de base en el pa�s y precis� al respecto que “cuando est�n formadas y guiadas por personas cuya motivaci�n es el amor de Cristo, estas comunidades han probado ser valiosas herramientas de evangelizaci�n al trabajar en conjunto con las parroquias locales”.

Seguidamente resalt� que la Iglesia en Filipinas es afortunada por contar con la ayuda de diversas organizaciones de laicos: “Para hacer frente a las preguntas de nuestro tiempo los laicos necesitan escuchar el mensaje del Evangelio en su plenitud y comprender as� sus implicaciones, tanto en su vida personal como en la sociedad en general, conform�ndola al Se�or. Por lo tanto, os exhorto a dedicar atenci�n especial a la gu�a de estos grupos para que la primac�a de Dios sea siempre su objetivo”.

La fe juega un papel importante en la juventud filipina

Benedicto XVI dijo luego sentirse “contento porque en vuestro pa�s la fe juega un papel muy importante en la vida de los j�venes, un hecho que se debe en gran parte a la paciente labor de la Iglesia local para llegar a la juventud en todos los niveles”. Por ello anim� a los obispos a seguir “mostrando a los j�venes la importancia de los sacramentos como instrumentos de la gracia y la ayuda de Dios. Esto es particularmente cierto en el sacramento del matrimonio, que santifica la vida conyugal desde el principio, de modo que la presencia de Dios sostenga a las parejas j�venes en sus dificultades”.

El Papa explic� que la atenci�n pastoral a los j�venes, “que aspira a establecer la primac�a de Dios en sus corazones, tiende a traducirse no s�lo en vocaciones al matrimonio cristiano, sino tambi�n en llamamientos de todo tipo”. Tras afirmar que a�n son escasos los sacerdotes en el mundo, pidi� que “los j�venes filipinos que se sientan llamados al sacerdocio y a la vida religiosa respondan con generosidad a los impulsos del Esp�ritu”.

Formaci�n integral de los aspirantes al sacerdocio y la vida religiosa

“�Que la misi�n de evangelizaci�n de la Iglesia sea sostenida por los maravillosos dones que el Se�or ofrece a quienes el llama! A su vez, como pastores, ustedes desear�n ofrecer a estas j�venes vocaciones un plan bien desarrollado y cuidadosamente aplicado de formaci�n integral para que as� su inclinaci�n inicial hacia una vida de servicio a Cristo y sus fieles llegue a su madurez espiritual y humana”, concluy�.</p>

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2 comentarios

Comentario de Vicente
Cristo en cada alma.
19/02/11 2:18 PM
Comentario de Sergio
Padre, no se esfuerce, no merece la pena echar margaritas a los cerdos. Las veces que he intentado predicar, en el mejor de los casos no me han comprendido o se han re�do de m�. Ya que en esta �poca oscura de materialismo y frivolidad la gente no quiere saber de Cristo y de su Iglesia, lo mejor es encerrarnos en la ciudadela los pocos fieles que a�n quedamos y esperar que pase la tormenta.
19/02/11 11:21 PM

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